Descubre los derechos del arrendatario de una vivienda

¿Sabías que cada primer lunes del mes de octubre se celebra el Día Mundial del Inquilino? En España, casi el 25% de la población se encuentra actualmente en régimen de alquiler.

A pesar de ser un país de propietarios, es importante fomentar el alquiler justo y accesible para todo el mundo, así como defender los derechos de aquellos que no tienen una vivienda en propiedad.

Derechos del arrendatario de una vivienda

La Ley de Arrendamientos Urbanos (LAU) determina cuáles son los derechos de los inquilinos en nuestro país.

• Acordar el coste del alquiler y la duración del contrato

Siempre que se haga antes de firmar el contrato, se considera completamente legal negociar un descuento en la cuota de las rentas.

Asimismo, la Ley establece que, aunque el contrato de alquiler se firme por un periodo de tiempo de un año, puede darse por terminado a los seis meses. Eso sí, siempre que se comunique al propietario la decisión con una antelación mínima de treinta días.

Además, el contrato de arrendamiento puede prorrogarse anualmente tres años, salvo que el propietario, sus familiares en primer grado de consanguinidad o cónyuge necesiten el inmueble para vivir permanentemente.

• Acordar el precio de la renta a cambio de mejoras en la vivienda

Siempre y cuando no afecten a la seguridad ni estabilidad del edificio, pueden realizarse todo tipo de obras de mejora y así negociar con el propietario una deducción de las mensualidades.

Ahora bien, dicho acuerdo debe constar por escrito. De lo contrario, el propietario tiene el derecho de prescindir del contrato inmediatamente.

• Recuperar la fianza si no hay daños

Una vez termina el contrato, se está en pleno derecho de recuperar la fianza depositada al principio. Siempre y cuando no haya daños en el inmueble ni pagos pendientes.

El propietario debe cumplir con este deber en un plazo de treinta días después de la devolución de las llaves.

• Adquisición preferente de la vivienda

En el caso de que el propietario tomara la decisión de vender la vivienda mientras la tiene arrendada, el inquilino tendría preferencia para adquirirla antes que cualquier otra persona, a no ser que se acuerde lo contrario.

Deberá recibir un aviso del titular de la vivienda con un margen de treinta días para tener tiempo suficiente de tomar una decisión.

• Denunciar al propietario si entra en la vivienda sin permiso

Aunque sea de su propiedad, el arrendador sólo puede entrar en la vivienda en dos supuestos:

a) Si dispone de una autorización del inquilino.
b) Si dispone de una autorización judicial.

De no ser así, y de acuerdo con el artículo 18.2 de la Constitución, el inquilino tiene derecho a interponer una denuncia por violación del domicilio.

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